jueves, 1 de noviembre de 2012

AUDIENCIA PAPAL

BENEDICTO XVI

Plaza de San Pedro


Miércoles 31 de octubre de 2012

Queridos hermanos y hermanas:

Continuamos nuestra meditación sobre la fe católica partiendo de algunas preguntas: ¿Tiene la fe sólo un carácter personal, individual?, ¿me interesa sólo a mí?, ¿la vivo solo?

La fe es un acto eminentemente personal, es una experiencia íntima. Yo «creo», pero mi creer no es el resultado de una reflexión solitaria, sino el fruto de una relación con Jesús, en la que la fe me viene dada por Dios a través de la comunidad creyente que es la Iglesia. La fe nace en la Iglesia, conduce a ella y en ella se vive. Tenemos necesidad de la Iglesia para confirmar nuestra fe y hacer experiencia de los dones de Dios: la Palabra, los sacramentos, la gracia y el testimonio del amor. Ella nos da la garantía de que lo que creemos es el mensaje originario de Cristo, predicado por los Apóstoles.

Saludo a los peregrinos de lengua española, en particular a los miembros de la Asociación “Mensajeros de la Paz”, que están celebrando las bodas de oro de su fundación, invitándolos a que, arraigados cada vez más en Cristo, continúen siendo heraldos de la misericordia de Dios entre las personas más desprotegidas. Saludo también a los demás grupos provenientes de España, Argentina, México y otros países latinoamericanos. En un mundo aparentemente dominado por el individualismo, la fe nos llama a ser Iglesia, portadores del amor de Dios para todo el género humano. Muchas gracias.

Este miércoles compartiamos en una reunión en nuestra Basílica un material de formación que nos preparo nuestro Padre Director, titulada La Asamblea celebrante en resumidas cuentas el tema va unido conel mensaje que nos da hoy el Papa, nos enseñaba que la vida cristiana es hacer camino, es seguir a Jesús firmes en la fe, convencidos de su presencia en medio de nosotros pero que estas cosas las hacemos como IGLESIA juntos, voluntariamente tomamos la decisión de seguir la fe Católica,  iniciamos un caminar junto a muchos hermanos más y no en soledad.
DIOS BENDIGA A NUESTRO SANTO PADRE, PAPA BENEDICTO XVI.



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